Los cines antiguos de Malasaña puede que ya no existan, pero no por ello vamos a olvidarlos. Cines y Malasaña son dos palabras que han ido de la mano durante años. No sólo porque algunos de los cineastas españoles más famosos actualmente, como Almodóvar, formaran parte indispensable de la Movida Madrileña, si no porque este barrio ha acogido más de una docena de cines desde finales del pasado siglo.
Sin embargo, a día de hoy no queda ninguno abierto al público. Todos los que en su día fueron espacios dedicados a la imagen en movimiento hoy han cambiado de negocio. No obstante, todavía encontramos un pequeño reducto: el Videoclub Ficciones.
Ficciones, un videoclub en plena Malasaña
Con más de 20.000 títulos en sus estanterías, el Videoclub Ficciones se mantiene como un pequeño espacio dedicado al cine. Un fenómeno digno de admiración ya que nos encontramos en la época de HBO, Netflix, Filmin y, aunque a veces no queramos admitirlo, de la gratuidad en internet.
Aún así, ahí sigue este videoclub, que se redefine como DVDClub, ofreciendo a todo aquel que se acerque a la calle San Vicente Ferrer la oportunidad de ver el mejor cine independiente y de autor.
Su objetivo es, según ellos, conseguir crear el mejor catálogo en Europa y para ello trabajan a destajo.
Cines Antiguos, ubicados en Malasaña
Aunque los alrededores de este barrio madrileño sí cuentan con salas donde se proyectan películas, en la actualidad no queda ninguno.
Todos los cines antiguos del barrio han cerrado e incluso algunos guardan tras su nombre interesantísimas historias.
Pero primero pongámonos en contexto. El cine llegó a Madrid a finales del siglo XIX. Sin embargo, en aquel entonces era un lujo que muy pocos podían permitirse.
Pero con el paso de las décadas y las mejoras salariales y laborales en España, el cine se convirtió, poco a poco, en una opción de ocio que cada vez más personas podían costearse.
Así fue como históricos espacios como los cines Coliseo Noviciado (1900), Coliseo Ena Victoria (1907), Cervantes (1911), Salón Edison (1913), Playa de Biarritz (1914), Madrid Cinema (1919), Dos de mayo (1928), Barceló (1931), Pez (1948), Alhambra (1950), Chaplin (años 80), Luna (1980) y Alfil (1983) abrieron sus puertas.
Entre los mencionados, destaca el Barceló, que, además de cine, fue una sala de fiestas. También fue un teatro antes de convertirse hoy en una discoteca.
Algo parecido ocurrió con el Cervantes, sólo que hoy es un supermercado.
No obstante, el final más trágico lo tuvo el Coliseo del Noviciado. Apenas diez años después de su apertura, se quemó. Reabrió como el Teatro Álvarez Quintero, que precedió al X Cinema que estuvo abierto hasta mediados de los años 60.
Cines en el centro de Madrid
Malasaña ya no tiene salas de proyección, pero por los alrededores encontramos algunos de los más reseñados de Madrid. El Pequeño Cine Estudio, la Sala Berlanga, Cines Verdi, Cines Princesa y Cines Golem, entre otros muchos.
Deja un comentario